El sábado 24 de septiembre sucedió un hecho de fundamental importancia, notablemente minimizado por los medios de comunicación masivos, pero que ha sido calificada por el Canciller de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales del Vaticano, Mons. Marcelo Sánchez Sorondo, como “un modelo para todo el mundo”. Fue la jornada de reflexión, que bajo el lema de Tierra, Techo y Trabajo, se realizó en el histórico salón Felipe Vallese de la CGT, con la participación de los obispos que componen la Comisión de Pastoral Social, Mons. Jorge Lozano, Fernando Maletti y Jorge Lugones y los Secretarios Generales de la CGT, Juan Carlos Schmid y Héctor Daer.
El evento fue abierto por Juan Carlos Grabois, el joven militante, que orienta el Movimiento de Trabajadores Excluidos y participa de la CTEP (Central de Trabajadores de la Economía Popular), además ha sido uno de los organizadores de los Encuentros que el papa Francisco ha mantenido con los Movimientos Sociales del mundo, en el Vaticano y el último año en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia. Hace poco tiempo ha sido designado como consultor del Pontificio Consejo de Justicia y Paz.
Grabois presentó el desarrollo de la jornada destacando la participación de los jóvenes y de las mujeres, resaltando que en el panel de inicio, la mujer que debía participar estaba detenida, Milagro Sala. Luego manifestó “Gracias a la CGT, muchas gracias por esta oportunidad de hacer una actividad donde el protagonismo no lo tienen la política ni los dirigentes, lo tienen los pobres, los campesinos, los que luchan por el techo, la tierra y el trabajo”. Agregando luego “Nos gustaría escribir una página del movimiento obrero de la Argentina zanjando la grieta que separa a los integrados de los excluidos”.
De inmediato introdujo la jornada el padre Carlos Acaputto, responsable de la Pastoral Social de Bs. As., quien recordó las palabras del papa Francisco en Bolivia cuando manifestó “Los pobres ya no esperan, quieren ser protagonistas”, recalcando así mismo que la tierra, el techo y el trabajo son derechos sagrados. También recordó las palabras del papa cuando afirmó que “Este sistema ya no se aguanta”.
La bienvenida correspondió a uno de los secretarios generales de la CGT, Juan C. Schmid, quien expresó la solidaridad del movimiento obrero organizado con los trabajadores de la economía social y con palabras vibrantes manifestó la necesidad de la unidad de los trabajadores de la economía formal y de la economía informal, “en este momento en que hay más de 14 millones pobres en la argentina”. Schmid destacó la presencia de muchos dirigentes sindicales como Frutos, del Sindicato de Panaderos, Frigerio, de Cerveceros, Rodolfo Daer de la Alimentación, entre otros.
De inmediato hizo uso de la palabra uno de los expositores más aplaudidos, Esteban “el Gringo” Castro, Secretario General de la CTEP, quien recordó al escritor Carlos Fuentes cuando manifestó que “el pretexto para justificar la pobreza está agotado”. Refiriéndose luego al proyecto de ley de Salario Social Complementario (al que atento a su importancia, nos referiremos en una próxima nota), destacando que después de la multitudinaria marcha del 7 de agosto, logró la adhesión de muchos legisladores que antes no mostraron entusiasmo por el mismo.
Con gran contundencia afirmó: “queremos levantarnos cada mañana, ponernos las pilchas del laburo e ir a trabajar como hacíamos antes”. Cerrando la exposición con una condena a esta barbarie de la denominada justicia por mano propia (que algunos no tienen la valentía de condenar), destacando que “con laburo no hay chorros”.
El dirigente de la Corriente Clasista y Combativa, J. Carlos Alderete agradeció la acciones de “nuestro querido papa Francisco” y manifestó su reconocimiento por los gestos de solidaridad que recibió ante las amenazas que le hicieron por la campaña “Ni un pibe menos por la droga”. Esta tarea también es realizada por otras organizaciones como habitualmente destaca Esteban Castro de la CTEP.
Alderete resaltó la labor en la recuperación de los pibes con adicciones, de nuestro amigo, el padre Pepe Di Paola.
Luego intervino Daniel Menéndez de Barrios de Pie y otro de los secretarios generales de la CGT, Hector Daer, que al ser presentado como el dueño de casa, afirmó rápidamente que “esta casa era de todos”. Luego agregó en tono autocritico que la CGT no ocupó el lugar que hubiera correspondido en su momento, pero que desde ahora la organización debería ser la expresión de los trabajadores formales como de los informales, mencionando que él y el diputado Solá iban a “militar” junto con Grosso y otros legisladores para que el proyecto de Salario Social Complementario fuera aprobado.
Cerró este panel Mons. Sánchez Sorondo (un histórico miembro de la estructura vaticana que rápidamente se puso al servicio del papa Francisco), manifestando su emoción por poder estar “en este histórico salón” y dijo que Francisco siempre recordaba la necesidad de que “los hermanos sean unidos, porque si no se los comen desde afuera” y que él participaba en este momento de un hecho histórico que se convertía en un modelo para el mundo, dado que la exclusión aumentaba por un sistema económico irracional y anticristiano, “un sistema que crea pobreza, que destruye a la tierra y al hombre mismo.”
Manifestó su satisfacción por el hecho de que los movimientos sociales combatan la droga y recordó al Gral. Perón que “pensaba una gran Argentina” e hizo mención al Movimiento Occupy Wall Street que ponía en claro que la exclusión alcanzaba al 99%, en referencia a la consigna de los jóvenes norteamericanos que manifestaban “somos el 99%.”
Los paneles siguientes fueron sobre el Eje Tierra, que fue coordinado por Mons. Jorge Lozano y contó con la participación de dirigentes campesinos de Santiago del Estero, Corrientes, y referentes de las comunidades Mapuches de Neuquén, Kollas de Jujuy, Guaraníes y horticultores de La Plata. Luego el Eje fue Techo, coordinado por Mons. Jorge Lugones quien citando a Francisco manifestó “Una casa para cada familia, familia y vivienda van de la mano.”, contó con la participación de dirigentes villeros y de cooperativas de viviendas y por último el Eje del Trabajo fue coordinado por Mons. Fernando Maletti, donde participaron dirigentes de cooperativas de trabajadores, cartoneros, recicladores, costureros y empresas recuperadas.
Participaron del evento amigos de Generación Francisco de Parana, San Miguel, Moron, San Martín entre otros lugares.
Salimos convencidos de que habíamos participado de un hecho que aunque ocultado era histórico. La fotografía del panel de inició mostraba a los dirigentes sociales, los secretarios de la CGT y al representante del Vaticano, en un hecho impensado hace poco tiempo. Otra Argentina y otro mundo son posibles y nos alegra, muy humildemente, poder ser parte de ello.
Crónica de Jorge Benedetti.
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